viernes, 24 de mayo de 2013
domingo, 28 de abril de 2013
Un mandamiento nuevo
Un mandamiento nuevo nos dio el Señor, que nos amáramos todos como Él nos amó; que nos amáramos todos como Él nos amó. Acercaos, hermanos todos, que es Dios mismo quien invita. Dios perdona nuestras culpas, y a su mesa nos invita. Donde hay caridad y amor, Cristo está, y está la Iglesia. El que no ame a sus hermanos, no se acerque a este convite. La señal de los cristianos es amarse como hermanos. Perdonemos al hermano como Cristo nos perdona. Cristo, luz, verdad y vida, al perdón y amor invita. Quien no ama a sus hermanos miente si a Dios dice que ama. Lo que hacemos al hermano, a Dios mismo se lo hacemos. Si al enfermo visitamos a Dios mismo consolamos. En la vida y en la muerte Dios nos ama para siempre.
lgm
jueves, 28 de marzo de 2013
Triduo Pascual
Se conoce como Triduo Pascual al tiempo comprendido desde la tarde
del Jueves Santo,
hasta la madrugada del Domingo de
Pascua, en donde se celebran los tres grandes misterios de la
redención: la Pasión, la Muerte y la Resurrección de Jesucristo. Para la
liturgia católica el "triduo Pascual" es una sola celebración que
empieza el jueves con la Misa vespertina de la cena del Señor en donde se evoca
la última cena de Jesús donde instituyó el Sacramento de la Eucaristía, el del
Orden Sacerdotal y el mandamiento del amor. Al final de esta primera parte de
la celebración el sacerdote no imparte la bendición porque continua el día
siguiente. El viernes Santo se medita sobre la pasión de Cristo y se conmemora
la cruz; la Iglesia, siguiendo una antiquísima tradición, este día no celebra
la Eucaristía, sino que los fieles comulgan con las hostias sobrantes del día
anterior. El Sábado Santo es el día del gran silencio: la Iglesia permanece
junto al sepulcro del Señor, meditando su pasión y muerte, esperando su
resurrección. La celebración del triduo termina el domingo (se considera
domingo a partir de las 18:00 hs del sábado, la víspera)con la Misa de
resurrección. Es el domingo de los domingos, y al final de esta celebración se
imparte la bendición. El Triduo Pascual es el corazón del año litúrgico.
La
expresión Triduo Pascual,
aplicada a las fiestas anuales de la Pasión, Muerte y Resurrección, es relativamente reciente, pues no se remonta más allá de los años treinta del
siglo XX. Pero ya a finales del siglo IV San Ambrosio hablaba de un Triduum Sacrum para referirse a las etapas históricas
del misterio pascual de Cristo que, durante tres días et passus est, et quievit et
resurrexit. San Agustín utilizó parecida expresión (Sacratissimum
Triduum) para indicar los tres días de Cristo crucifixi, sepulti, suscitati.
mlg
domingo, 2 de diciembre de 2012
BENDICIÓN CORONA DE ADVIENTO EN EL HOGAR
En algunas parroquias o colegios se hace la bendición de las
Coronas de Adviento. Si no se puede asistir a estas celebraciones, se puede
hacer la bendición en familia con la siguiente oración:
Señor Dios, bendice con tu poder nuestra corona de adviento para
que, al encenderla, despierte en nosotros el deseo de esperar la venida de
Cristo practicando las buenas obras, y para que así, cuando Él llegue, seamos
admitidos al Reino de los Cielos.
Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor.
Todos: Amén.
La bendición de Dios, Padre, Hijo y Espíritu Santo descienda sobre
esta Corona y sobre todos los que con ella queremos preparar la venida de
Jesús.
PROPONEMOS ESTE ESQUEMA SENCILLO PARA ORAR AL ENCENDER LA VELA DE
ADVIENTO
PRIMER DOMINGO
LLAMADA A LA VIGILANCIA
ENTRADA.
Se entona algún canto.
Saludo.
Guía: En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
Acto de Contrición.
Guía: Reconozcamos ante Dios que somos pecadores.
Todos: Yo confieso ante Dios todopoderoso...
LITURGIA DE LA PALABRA. Lectura del santo evangelio según san
Marcos 13,33: “Estén preparados y vigilando, ya que no saben cual será el
momento”. Palabra del Señor. (Breve pausa para meditar)
Reflexión.
Guía: Vigilar significa estar atentos, salir al encuentro del
Señor, que quiere entrar, este año más que el pasado, en nuestra existencia,
para darle sentido total y salvarnos.
ENCENDIDO DE LA VELA. Oración.
Guía: Encendemos, Señor, esta luz, como aquel que enciende su
lámpara para salir, en la noche, al encuentro del amigo que ya viene. En esta
primer semana de Adviento queremos levantarnos para esperarte preparados, para
recibirte con alegría. Muchas sombras nos envuelven. Muchos halagos nos
adormecen.
Queremos estar despiertos y vigilantes, porque tú traes la luz más
clara, la paz más profunda y la alegría más verdadera. ¡Ven, Señor Jesús!.
¡Ven, Señor Jesús!
PADRE NUESTRO
Guía: Unidos en una sola voz digamos: Padre Nuestro...
CONCLUSIÓN
Guía: Ven, Señor, haz resplandecer tu rostro sobre nosotros.
Todos: Y seremos salvos. Amén.
SEGUNDO DOMINGO
ENTRADA. Se entona algún canto. Guía: En el nombre del Padre y del
Hijo y del Espíritu Santo.
Acto de Contrición.
Guía: Reconozcamos ante Dios que somos pecadores.
Todos: Yo confieso ante Dios todopoderoso...
LITURGIA DE LA PALABRA.
Lectura de la II carta de San Pedro 3,13-14: ”Nosotros esperamos
según la promesa de Dios cielos nuevos y tierra nueva, un mundo en que reinará
la justicia. Por eso, queridos hermanos, durante esta espera, esfuércense para
que Dios los halle sin mancha ni culpa, viviendo en paz". Palabra de Dios.
Breve pausa para meditar
Reflexión
Guía: ¿Qué va a cambiar en mí, en nosotros en este Adviento? ¿ Se
notará que creemos de veras en Cristo?
ENCENDIDO DE LA VELA. Oración.
Guía: Los profetas mantenían encendida la esperanza de Israel.
Nosotros, como un símbolo, encendemos estas dos velas. El viejo tronco está
rebrotando se estremece porque Dios se ha sembrado en nuestra carne...
Que cada uno de nosotros, Señor, te abra su vida para que brotes,
para que florezcas, para que nazcas y mantengas en nuestro corazón encendida la
esperanza. ¡Ven pronto, Señor! ¡Ven, Salvador!
PADRE NUESTRO.
Guía: Unidos en una sola voz digamos: Padre nuestro...
CONCLUSION.
Guía: Ven, Señor, haz resplandecer tu rostro sobre nosotros.
Todos: Y seremos salvados. Amén.
TERCER DOMINGO
ENTRADA.
Se entona algún canto. Saludo.
Guía: En el nombre del Padre y del Hijo Y del Espíritu Santo. Acto
de Contrición.
Guía: Reconozcamos ante Dios que somos pecadores.
Todos: Yo confieso ante Dios todopoderoso...
LITURGIA DE LA PALABRA.
Lectura de la Primera carta a los Tesalonicenses 5,23: ”Que el
propio Dios de la paz los santifique, llevándolos a la perfección. Guárdense
enteramente, sin mancha, en todo su espíritu, su alma y su cuerpo, hasta la
venida de Cristo Jesús, nuestro Señor”. Palabra de Dios.
Breve pausa para meditar. Reflexión.
Guía: Los hombres de hoy no verán en persona a Cristo en esta
Navidad. Pero sí verán a la Iglesia, nos verán a nosotros. ¿Habrá más luz, más
amor, más esperanza reflejada en nuestra vida para que puedan creer en El?
ENCENDIDO DE LA VELA. Oración.
Guía: En las tinieblas se encendió una luz, en el desierto clamó
una voz. Se anuncia la buena noticia: ¡El Señor va a llegar! ¡Preparen sus
caminos, porque ya se acerca! Adornen su alma como una novia se engalana el día
de su boda. ¡Ya llega el mensajero!. Juan Bautista no es la luz, sino el que
nos anuncia la luz.
Cuando encendemos estas tres velas cada uno de nosotros quiere ser
antorcha tuya para que brilles, llama para que calientes. ¡Ven, Señor, a
salvarnos, envuélvenos en tu luz, caliéntanos en tu amor!
PADRE NUESTRO.
Guía: Unidos en una sola voz digamos: Padre nuestro...
CONCLUSION.
Guía: Ven, Señor, haz resplandecer tu rostro sobre nosotros.
Todos: Y seremos salvados. Amén
CUARTO DOMINGO
Todos hacen la señal de la cruz.
Guía: "Nuestro auxilio es en el nombre del Señor"
Todos: "Que hizo el cielo y la tierra"
Liturgia de la Palabra:
Primera lectura: Rm 13,13-14 "Conduzcámonos como en pleno día,
con dignidad. Nada de comilonas y borracheras, nada de lujuria ni desenfreno, nada
de riñas ni pendencias. Vestios del Señor Jesucristo". "Palabra de
Dios"
Todos: "Te alabamos Señor".
Segunda lectura: 2 Tes. 1,6-7 "Es justo a los ojos de Dios
pagar con alivio a vosotros, los afligidos, y a nosotros, cuando el Señor Jesús
se revele, viniendo del cielo acompañado de sus poderosos ángeles, entre las
aclamaciones de sus pueblo santo y la admiración de todos los creyentes."
-"Palabra de Dios"
Todos: "Te alabamos Señor".
Guía: "Ven, Señor, y no tardes.
Todos: "Perdona los pecados de tu pueblo".
SE ENCIENDEN LAS CUATRO VELAS
Guía: "Bendigamos al Señor"
Todos hacen la señal de la cruz mientras dicen: "Demos gracias
a Dios".
Humildad y gloria
El Nacimiento de Jesús
Guía: Lectura del Evangelio según San Lucas (2:6-7)
"Y sucedió que, mientras ellos estaban allí, se le cumplieron
los días del alumbramiento, y dio a luz a su hijo primogénito,
le envolvió en pañales y le acostó en un pesebre, porque no tenían
sitio en el alojamiento."
"Palabra de Dios"
Todos: "Te alabamos Señor".
MEDITACION
La Virgen y San José, con su fe, esperanza y caridad salen
victoriosos en la prueba. No hay rechazo, ni frío, ni oscuridad ni incomodidad
que les pueda separar del amor de Cristo que nace. Ellos son los benditos de
Dios que le reciben. Dios no encuentra lugar mejor que aquel pesebre, porque
allí estaba el amor inmaculado que lo recibe.
Nos unimos a La Virgen y San José con un sincero deseo de renunciar
a todo lo que impide que Jesús nazca en nuestro corazón.
Tiempo de silencio / Tiempo de intercesión
Padre Nuestro / Ave María.
ORACIÓN FINAL
Derrama Señor, tu gracia sobre nosotros, que, por el anuncio del
ángel, hemos conocido la encarnación de tu Hijo, para que lleguemos por su
pasión y su cruz a la gloria de la resurrección. Por nuestro Señor Jesucristo.
Todos: "Amén"
Inicio Nuevo Año Liturgico
Hoy comienza el tiempo de adviento de la iglesia católica. Es el
primer período del año litúrgico cristiano, que consiste en un tiempo de
preparación para el nacimiento de Cristo, o dicho con sencillez, es la
preparación previa a la Navidad.
Su duración puede variar de 21 a 28 días, dado que se celebran los
cuatro domingos más próximos a la festividad de Navidad, donde los fieles lo
consideran un tiempo de reflexión y de perdón.
Durante el adviento se coloca en las iglesias y también en algunos
hogares una corona de ramas de pino, llamada corona de adviento, con cuatro
velas, una por cada domingo de preparación al advenimiento de la llegada del
Niño Jesús.
Hay una pequeña tradición de adviento: a cada una de esas cuatro
velas de colores, se le asigna una virtud que hay que mejorar en esa semana,
por ejemplo: la primera, El Amor; la segunda, La Paz; la tercera, La Tolerancia
y la cuarta, La Fe.
La palabra ADVIENTO es de origen latín y quiere decir VENIDA. Es el
tiempo en que los cristianos nos preparamos para la venida de Jesucristo. El
tiempo de adviento abarca cuatro semanas antes de Navidad.
Nueva realidad:
Los cristianos supieron apreciar la enseñanza de Jesús: Juan 8,12:
«Yo soy la luz del mundo; el que me siga no caminará en la oscuridad, sino que
tendrá la luz de la vida.». La luz que prendemos en la oscuridad del invierno
nos recuerda a Cristo que vence la oscuridad. Nosotros, unidos a Jesús, también
somos luz: Mateo 5,14 «Vosotros sois la luz del mundo. No puede ocultarse una
ciudad situada en la cima de un monte."
Jesús es la luz que ha venido, que está con nosotros y que vendrá
con gloria. Las velas anticipan la venida de la luz en la Navidad: Jesucristo.
La corona de adviento se hace con follaje verde sobre el que se
insertan cuatro velas. Tres velas son violeta, una es rosa. El primer domingo
de adviento encendemos la primera vela y cada domingo de adviento encendemos
una vela mas hasta llegar a la Navidad. La vela rosa corresponde al tercer
domingo y representa el gozo. Mientras se encienden las velas se hace una
oración, utilizando algún pasaje de la Biblia y se entonan cantos. Esto lo
hacemos en las misas de adviento y también es recomendable hacerlo en casa, por
ejemplo antes o después de la cena. Si no hay velas de esos colores aun se
puede hacer la corona ya que lo mas importante es el significado: la luz que
aumenta con la proximidad del nacimiento de Jesús quien es la Luz del Mundo. La
corona se puede llevar a la iglesia para ser bendecida por el sacerdote.
La corona de adviento encierra varios simbolismos:
La forma circular: El círculo no tiene principio ni fin. Es señal
del amor de Dios que es eterno, sin principio y sin fin, y también de nuestro
amor a Dios y al prójimo que nunca debe de terminar.
Las ramas verdes: Verde es el color de esperanza y vida. Dios
quiere que esperemos su gracia, el perdón de los pecados y la gloria eterna al
final de nuestras vidas. El anhelo más importante en nuestras vidas debe ser
llegar a una unión más estrecha con Dios, nuestro Padre.
Las cuatro velas: Nos hacen pensar en la obscuridad provocada por
el pecado que ciega al hombre y lo aleja de Dios. Después de la primera caída
del hombre, Dios fue dando poco a poco una esperanza de salvación que iluminó
todo el universo como las velas la corona. Así como las tinieblas se disipan
con cada vela que encendemos, los siglos se fueron iluminando con la cada vez
más cercana llegada de Cristo a nuestro mundo. Son cuatro velas las que se
ponen en la corona y se prenden de una en una, durante los cuatro domingos de
adviento al hacer la oración en familia.
Las manzanas rojas que adornan la corona: Representan los frutos
del jardín del Edén con Adán y Eva que trajeron el pecado al mundo pero
recibieron también la promesa del Salvador Universal.
El listón rojo: Representa nuestro amor a Dios y el amor de Dios
que nos envuelve.
lgmg
lgmg
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